Home staging: fórmula infalible para aumentar la venta de inmuebles
En muchas ocasiones, la decoración de una vivienda puede motivarnos a tomar la decisión de comprarla o alquilarla, aunque en otras ocasiones, nos pueden disuadir de hacerlo. A esta práctica se le conoce como home staging o marketing inmobiliario, y consiste en la preparación de un inmueble para que su presencia en el mercado resulte más atractiva para captar la atención de posibles compradores o inquilinos.
Por este motivo, en Victoria Cremades le damos la importancia que merece y, además de asesorar a nuestros clientes como agencia inmobiliaria, también lo hacemos como expertos en home staging. Detalles que marcan la diferencia, ayudando a rentabilizar al máximo cualquier alquiler o venta, y agilizar los tiempos.
¿Cuál es el verdadero objetivo del home staging?
El objetivo más importante del home staging radica en aumentar las posibilidades de venta o alquiler de una vivienda en el menor tiempo posible introduciendo un factor clave: el sentimiento de atracción u optimización visual mediante la decoración de la misma.
Este hecho implica un diseño del hogar por parte del propietario, el cual se debe preocupar por una serie de cuestiones, como:
Reparación de algún tipo de desperfecto (luces o bombillas que no funcionan, grifos en mal estado, cajones que no cierran, etc.).
● Decoración de las estancias intentando adoptar un criterio del “gusto de todos”.
● Iluminación de los espacios para generar una sensación de mayor amplitud.
● Distribución óptima del espacio con el fin de aprovechar cada rincón.
● Realzar los puntos positivos de la vivienda
Consejos de decoración que se deben tener en cuenta
Como expertos en Home Staging, nuestro cometido es ayudar a propietarios a las posibilidades para que el inquilino o comprador potencial se sienta en casa. Para ello, estos consejos enfocados en la decoración del hogar son imprescindibles:
- La importancia de los muebles para conseguir un efecto de mayor espacio y capacidad.
- La variedad de estilos ayudará a encajar en más gustos; por eso, deja a un lado la idea del total look.
- Ve más allá de las cosas imprescindibles. Es decir, no te quedes en amueblar la vivienda con lo esencial para vivir, piensa en todos los complementos poco útiles, como láminas, cuadros, elementos decorativos, etc.
- No te bases en el low cost, a veces lo barato sale caro. Piensa en aquello con mayor comodidad y de estilo neutro.
- Aprovecha al máximo las fortalezas del hogar. Por ejemplo, si el hogar cuenta con una terraza, ¡has de explotarla! Coloca plantas, macetas con estilo, mobiliario fresco, puntos de luz y de color… Esto, sin duda, es un punto diferenciador.
- Estilos decorativos que nunca defraudan: nórdico, minimalista e industrial. Cerrarse en banda en uno solo no es lo más acertado, pero pueden servir de inspiración o como hilo conductor decorativo
Con todas estas recomendaciones, pretendemos que saques el mayor partido a tu vivienda y, por supuesto, que tanto el futuro inquilino o comprador sienta que vive en el hogar de sus sueños, sintiéndose como en la casa de toda su vida.
“Una vivienda no es sólo un inmueble, es también una forma de consolidación
espiritual” (Mario Benedetti)
Victoria Cremades